Sí, éste es José justo al lado del mismísimo Jato Móvil, el increíble vehículo en cuyo remolque el Jato sube las mochilas a todos aquellos turistas de albergue que no se atreven a subir el Cebreiro como ha de hacerse. Esta noche tenía que haberme levantado y haber pinchado las ruedas de tan ilustre transporte. Así al día siguiente mucha gente se habría llevado una buena y educativa sorpresa.