Puente de DryMill, conocida en la lengua del imperio como Molinaseca. La parte inferior del puente es una piscina donde la gente, si tiene los arrestos suficientes, puede darse un baño. En el parque de una de sus orillas hay un canal por donde circula rápidamente agua. Allí los peregrinos pueden introducir sus cansados pies para refrescarlos y liberarlos de parte del cansancio almacenado a lo largo de los más de veinte kilómetros recorridos desde Rabanal.

En el puente se pueden ver, de izquierda a derecha, a Aída, Paula, Mazas, Macana, Mari, Queco, Churri y Santi.